- Título original: Dai Hai
- Año: 2016
- País: China
- Duración: 104 min.
- Género: Animación, aventuras, fantasía, drama
En un reino místico que existe debajo del mundo humano, poblado por seres de poder mágico, una chica llamada Chun participa en un ritual de llegada a la madurez donde es transportada a través de un portal de agua para experimentar el mundo humano en forma de un delfín rojo. Allí, se encuentra con un chico humano que vive junto al mar y que venera a las criaturas acuáticas. Durante una tormenta, Chun se enreda en una red de pesca cerca de la casa del chico y se ahoga mientras la libera de la red. Chun regresa a su mundo, llevándose la ocarina del chico con ella.
Chun negocia con el poseedor de almas para poder devolver la vida al joven. A cambio, tendrá que dar la mitad de su vida y tendrá que cuidar del alma, en forma de delfín blanco, hasta que crezca y se convierta en un gran delfín rojo capaz de regresar a su mundo.
Si os soy sincera, no conocía esta película de animación hasta que vi el trailer en Netflix y me llamó muchísimo la atención. Ni siquiera había leído el argumento y, lo que vi en el trailer, me dio a entender otra historia diferente. No sé por qué, pero creí que la protagonista, Chun, era la niña pequeña (quien es la hermana del joven que muere) y que, cuando crece, va a buscar a su hermano adentrándose en el reino mágico donde conoce al chico de cabello blanco. Pero como veis, es bastante diferente.
Me ha gustado mucho. Una animación radiante con un gran colorido en 2D al más estilo Miyakazi.
El final es demasiado triste para mí. Me dio mucho pesar el pobre chico de cabello blanco y su amor no correspondido. Si no es por él, ni ella estaría viva ni el humano habría vuelto a la vida.
8/10
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